Falta una semana para estar en España. Mientras tanto, seguimos haciendo reparaciones y paseando por la ciudad

Emilio arreglando el radar

"La vie en rose" y "L'oizeau rare" (así, con "z"), dos de los mejores restaurantes de Marigot (¡qué medallones de langosta ahumada y carpaccio de aguacates y cangrejo, entre otras cosas!)

Calle de Marigot con su típica arquirectura colonial

La Marina Port la Royal, rodeada de restaurantes. El del toldo amarillo es el "Chanteclair", le plus gastronomique.

Hay buenas tiendas: Hermès, Bulgari, Façonnable, Lacoste, Longchamps...

...y un típico mercadillo artesanal frente al mar

El WestIndies Shopping Mall frente al mar, con tiendas de lujo

La Plaza del mercado: alrededor de este templete están los puestos.
El lunes 17 la isla entró en alerta a causa de grandes olas del norte de más de 5 metros que llegarían el miércoles. Los coches patrulla de la policía avisaban a la población por medio de megafonía y en la Marina nos recomendaron amarrar bien los barcos. La bahía de Marigot, siempre llena de barcos, se quedó sola; se fueron los barcos al lagoon, incluso muchos que estaban en la Marina. Nosotros nos quedamos.

La bahía de Marigot, llena de barcos

Así se quedó después de la alerta.
La noche ha sido un poco movida, pero no demasiado. El barco se mo0vía como una batidora pero en la travesía las olas eran más grandes, e incluso en Marina del Este el barco se mueve más.

Por la mañana empieza a verse las olas dando en el rompiente

Barco mercante fondeado

El mismo barco, el jueves


La carretera hacia Grand Case

Buenas olas